Aquí te espero
Como cuando esperamos a alguien especial, yo debería estar
arreglado, perfumado, con el tiempo necesario para recibirte.
Debería tener la sala ordenada, la comida lista para
agasajarte y pensado de que charlar o que decirte.
Pero una vez más, ya es el tiempo en el que llegas. Y no he
hecho nada de lo que me hubiese gustado hacer para esperarte.
Yo estaré aquí y vos llegarás, sin que te haya pensado, hablado
o llamado.
Solo se que aquí te espero, de esta manera tan irresponsable
e infantil, de querer recibirte sin siquiera mirarme hacia adentro.
Ya sabes como soy… me pierdo en el mundo tratando de
alcanzar el tiempo, dejo que el peso de mi carga no me deje ver tu cielo, me
escondo en las rutinas de las que luego reniego. Pero sin embargo te espero,
porque sé que sin vos no puedo…
Vení, recorré y camina conmigo mi camino, pisá con tus pies
mi suelo. Háblame en silencio, levantá mi mirada a lo eterno.
Y aunque vos seas el niño, acúname en tus brazos, susúrrame tu
sueño….
Recordame que por nosotros viniste, y para nosotros tenés el
cielo.